FERMENTADOS Y CÓMO
PREPARARLOS
El limón por si solo brinda un sinfín de beneficios a nuestro
organismo y también como “aderezo” de la comida mexicana es
indispensable. Sin embargo, hay otras formas de consumirlo y nos referimos al
LIMÓN FERMENTADO, un condimento que puede enriquecer tus platillos
favoritos.
El conservar limones a partir de la FERMENTACIÓN tiene su origen
en la medicina hindú, donde se cree que este cítrico incrementa sus propiedades
como fibra, vitaminas y minerales.
-Cuenta con altos niveles de potasio y sodio reducido, lo
cual, evita la retención de líquidos y a regular la presión arterial alta.
-Es una alternativa
que estimula la secreción biliar y ayuda a metabolizar las grasas; además, es
un aliado para el tratamiento de afecciones en el hígado y vesícula biliar.
-Mejorará la salud intestinal, debido a que previenen
cualquier tipo de enfermedad crónica u degenerativa.
Y después de leer esto, seguramente te estarás preguntando:
¿Cómo hacer tus propios limones fermentados en casa? A continuación, te lo
revelamos paso a paso:
Vas a necesitar:
4 limones lavados
200 gramos de sal de mar
1 frasco
Preparación
1. Corta los limones en cuatro partes.
-Agrega una cucharada de sal en su interior; que se cubran
perfectamente.
-Coloca sal al fondo del frasco y acomoda los limones; añade
más sal entre cada limón.
-Deja reposar en el refrigerador de dos a tres días.
-Puedes utilizarlos en sopas, ensaladas, aguas, jugos,
infusiones o licuados retirando la sal.
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