AUMENTAR TU
PRODUCTIVIDAD DURANTE EL DÍA
LA PRODUCTIVIDAD NO SE
GENERA AL LLEGAR A LA OFICINA sino desde antes de salir de casa. Estudios realizados por
universidades en Illinois, Reino Unido, Alemania y por la Organización
Internacional del Trabajo documentan cómo algunos ajustes en los hábitos de los
empleados pueden incrementarla entre 12 y 20%.
Ser productivo no se relaciona con hacer un gran número de
cosas, sino con EL VALOR QUE ÉSTAS GENERAN A LA ORGANIZACIÓN, explicó la
directora general de la consultora en bienestar empresarial Plus Point, Robyn
LaMont.
“Las personas exitosas tienen rituales para antes de salir de
su casa que tienen que ver con hacer ejercicio, planear su día y su alimentación”, dijo LaMont. Esto no es casualidad,
existen explicaciones científicas sobre las repercusiones de cada hábito.
A continuación algunas de las actividades que pueden tener un
efecto positivo en el trabajo:
1) HAZ UNA LISTA
LOS EJECUTIVOS PRODUCTIVOS priorizan sus tareas con
anticipación, esto les permite optimizar su tiempo y disminuir contratiempos,
enfocarse en cosas de mayor importancia y desarrollar nuevas ideas, explicó la
directora de la empresa Coaching y Desarrollo, Natalia Ortiz Mena.
Las listas de tareas y pendientes son de gran ayuda, además
de servir como recordatorios también son motivantes al ver que las tareas
fueron conseguidas, dijo la experta. Existen aplicaciones para smartphone o
tablets que ofrecen también opciones para armar listas y calendarizar
actividades.
2) DIVERTIRTE ES UN DEBER
El ocio y el entretenimiento son mal vistos por algunas
personas, pero en realidad alimentan a las mentes creativas. Actividades como
leer el periódico, platicar con la familia, o incluso hacer una llamada
telefónica a un ser querido, son actividades que no toman mucho tiempo y en
cambio favorecen el desarrollo de competencias útiles como la comunicación y el
trabajo en equipo.
“Cuando se tiene un espacio personal para socializar o algún
hobby la persona puede nutrirse a sí misma de cosas externas al trabajo y logra
recuperar la energía que desgasta en el trabajo”, dijo la directora de Innova Coaching
Profesional, Rossana Magaña.
3) HAZ EJERCICIO
No es necesario inscribirse a un gimnasio que podría aumentar
los tiempos de traslado, basta con dedicar entre 20 a 30 minutos para activar
los músculos y también el cerebro.
“Hacer ejercicio da energía para el resto del día y eleva los
niveles de endorfinas, los neurotransmisores que nos hacen sentir bien y estar
de mejor humor”, explicó LaMont. Estar de mejor humor, agregó, aumenta la receptividad
hacia los demás y mejora la relación con los colaboradores.
Es importante incluir al menos 30 minutos para hacer
ejercicio aeróbico como correr, saltar la cuerda, incluso subir y bajar las
escaleras.
4) UN BUEN DESAYUNO
La mala alimentación en el trabajo provoca una pérdida de
hasta 20% de la productividad, ya sea por malnutrición o al sobrepeso, de
acuerdo con un artículo Organización Internacional del Trabajo. “SI
LLEGAS A LA OFICINA CON HAMBRE, ES DIFÍCIL CONCENTRARSE”, dijo
LaMont.
Lo ideal es desayunar frutas, verduras y moderar los
carbohidratos, pues aunque estos últimos dan una sensación de satisfacción
rápida, su ingesta demanda más carbohidratos y puede repercutir en el aumento
del peso: “Un pan dulce y un café dan la sensación de satisfacción, pero al
poco rato el cuerpo quiere volver a comer”, agregó LaMont.
5) PIENSA EN POSITIVO
Empleados felices no sólo tienen una sonrisa en la cara,
también son 12% más productivos que aquellos inconformes, reveló EL
ESTUDIO “FELICIDAD Y PRODUCTIVIDAD”, elaborado por investigadores de
las universidades de Warwick (Reino Unido) e IZA (Alemania).
Antes de salir de casa, vale pena recapitular lo que se
consiguió en días pasados y tener algún pensamiento positivo. El optimismo suele
relacionarse con ingenuidad, pero eso es un error. “Se puede ser realista y
optimista a la vez. Lo importante es tener una visión general del panorama”,
dice Ortiz Mena.
Otra manera de reforzar la actitud positiva es mandar un
mensaje de agradecimiento a un colaborador cercano. “Motiva a quien recibe el
agradecimiento, pero también al que lo emite, porque así la mente se centra en
lo que sí funciona y no en lo que falla”, dijo la especialista. Lo
anterior, además, mejora el ambiente y relaciones laborales.
DESCUBRE CÓMO SACAR LA
YOGUI QUE HAY EN TI
SUENA EL DESPERTADOR Y –¡como siempre!– LE ECHAS UN PULSO A LAS AGUJAS DEL RELOJ.
Te vistes a la velocidad de la luz (de hecho, ni te has dado cuenta de que
llevas dos calcetines diferentes). Café. Reunión. Más café. Atasco. ¿El ritmo
frenético de tu día a día hace que llegues a casa como si fueras una zombi que
se ha escapado de The Walking Dead? Necesitas desconectar o, mejor dicho,
volver a conectar contigo misma. ¡Tenemos la solución! “El yoga afina tus
sentidos y te enseña a tomar conciencia del presente, potenciando la capacidad
de estar siempre en unión con quien eres, con los demás y con tu entorno”,
explica Carla Sánchez, actriz y profesora de Aomm TV.
Manos a la obra Deja a un lado las excusas y, sobre todo,
olvida tus miedos y complejos. Según un estudio realizado por Aomm TV, más del
52% de los españoles que nunca ha practicado yoga confiesa que le gustaría
hacerlo. ¿Formas parte de este porcentaje? Pues, para iniciarte no es
imprescindible ser capaz de doblarte como un compás. Es cierto que la
flexibilidad es clave para muchas posturas, pero tenemos buenas noticias: COMO
TODO, SE TRABAJA.
También existe la idea de que ES “UNA COSA DE CHICAS”, en
la que ni siquiera se suda la camiseta. ¡Error! Tal y como apunta Sánchez, “la
gran diversidad de estilos que hay en esta disciplina permite que puedas
encajar en alguno de ellos, dependiendo de tus objetivos y necesidades”.
A lo que añade: “En las variedades más dinámicas, como el Vinyasa y el Ashtanga, se
pueden quemar hasta 500 Calorías por sesión”. No te lo pienses más,
coge tu esterilla y empieza por la postura de Flor de loto.
Cambia el chip No te vamos a decir que con el yoga dará un
vuelco tu vida, pero casi. Una vez le pilles el truco y empieces a probar
nuevas asanas (posturas), verás que tu cuerpo da un giro en positivo.
Físicamente hablando, fortalecerás y moldearás tu body sin llegar a convertirte
en la mujer forzuda. ¿Lo mejor? Tu actitud cambiará e, incluso, emocionalmente
afrontarás los problemas con otra filosofía. “Se genera un estado de salud
global que se refleja en todo lo que haces. Esta sensación de orden te lleva a
estar de mejor humor, tiendes a comer más sano (es lo que te pide
el estómago), aumenta el apetito sexual, duermes mejor…”. Los datos de
Aomm TV hablan por sí solos: más del 79% de los yoguis encuestados han mejorado
su alimentación, más del 53% confiesan que están en su peso ideal; y más del
41% han aumentado su práctica de meditación.
Empieza con buen pie Ha llegado el momento, por fin te has
lanzado a seguir tu primera clase, ¿y ahora qué? No te pongas nerviosa, tal y
como aconseja nuestra experta: “El recién iniciado necesita empezar a
familiarizarse con las asanas y comprobar su estado físico”. No
quieras hacerlo perfecto el primer día, pero ten en cuenta que sí es
fundamental partir de una buena base y corregir los malos hábitos posturales
desde el minuto uno. Sánchez recomienda empezar por asanas como Tadasana y
Malasana, que no requieren demasiada experiencia.
Cuando ya se tiene cierta práctica, hay que profundizar y
comenzar a abrir el abanico de posturas. En este punto intermedio, Navasana y Halasana
son buenas opciones. Cuando ya se ha alcanzado un nivel avanzado, es momento de
desafíos, como los equilibrios sobre brazos de Tolasana. Gwyneth Paltrow,
Jennifer Aniston y Miranda Kerr son algunas de las celebs que se declaran
superfans. ¿Te apuntas? Lo tuyo con el yoga será el principio de una bonita
amistad. Así que cierra los ojos, inspira y expira. ¿Lista?
No hay comentarios:
Publicar un comentario